lunes, 26 de enero de 2015

Consideraciones a tener en cuenta en la lipoescultura

A la hora de recurrir a un tipo de intervención tan incisiva como la lipoescultura que es el moldeamiento de la piel a través de tratamientos ya sean incisivos en un quirófano como no incisivos, sin anestesia, hay que tener en cuenta determinadas consideraciones antes de llevarlo a cabo.
lipoescultura antes y después

Ventajas de la lipoescultura:

  •   Hará que toda la ropa te queda mucho mejor que al principio ya que tu cuerpo parecerá más delgado y te hará brillar con muchas y diferentes prendas que antes te limitaban.
  •   Se hacen unas mínimas incisiones o cortes profundos, que acaban en cicatrices más pequeñas que los procedimientos de contorno corporal abierto.
  • Se puede usar con la anestesia local pero al fin y al cabo es un procedimiento mucho menos invasivo y peligroso como puede ser una liposucción.

Desventajas de la intervención:

  •  Los resultados pueden verse afectados por el aumento de peso, el envejecimiento y el embarazo. Hay que tener en cuenta que las arrugas y bolsas caídas por la edad poco tienen por hacer ante este tipo de intervención, ya que está más enfocado a la pérdida de peso que a la belleza en sí.
  • La lipoescultura, como decimos, hay que tener bien claro que no es para mejorar el aspecto de la celulitis o de la temida piel suelta.
  • Puede que se tenga que bajar de peso para ser un mejor candidato para este tipo de intervención.

Estas son las tres principales ventajas y desventajas para pesar al considerar la lipoescultura. Si deseas centrarte en los específicamente únicos para ti, por favor consulta con tu cirujano plástico estético antes de realizarte nada ya que cada una es un mundo bien distinto. Un tratamiento importante en el cuerpo que como cualquier otra intervención que requiera de anestesia y más protocolos, habrá que valorar bien antes de aventurarse a ella.

miércoles, 21 de enero de 2015

¿CONDUCTISMO O CONDUCCION?

Como sabemos, podemos plantear los DCN desde diferentes posturas.
Frente al paciente es necesario hacer un corte en su historia para comenzar con el tratamiento, a fines de evitar males mayores en el interminable intento de desembarazarse de su pasado.
Pero cierto es, también, que ese pasado influye permanentemente en su presente, conduciéndolo por los caminos de la enfermedad.
Repasando el esquema de la conducta nutricional, herramienta de suma utilidad al momento de decidir donde efectuar dicho corte, vemos que en el paciente con DCN, pasado y presente se funden en uno para decidir el futuro. Los estímulos y asociaciones van siempre de la mano arrastrando a la persona hacia conductas perjudiciales.
Para alguna terapéutica tradicional, un par estimulo-respuesta "erróneos", son la causa de la enfermedad presente y debe ser reemplazado con pares estímulo-respuesta alternativos generados enérgicamente desde el exterior del paciente, desacondicionando unos para reemplazarlos por otros, para proponer una nueva funcionalidad individual.
Así los pacientes tendrían (aparentemente) dos opciones para la resolución de sus problemas: o las interminables terapias que exploran las hendijas más escondidas de su historia, o el conductismo que genera novedosos (y fuertes) estímulos que desplazan a los anteriores que originaron el DCN.

El termino conducta es confuso y esta impregnado tanto de prejuicios, como de una mala fama ganada a través de los relatos de algunos de los pacientes que rechazaron algunos tratamientos en esa dirección.

Si intentamos ser objetivos, debemos apuntar que nos resulta difícil aceptar que una personalidad que procesa en forma inconveniente algunos estímulos generando respuestas perjudiciales para la salud, procese otros estímulos externos satisfactoriamente. Y en la misma tesitura cabe preguntarse si el nuevo circuito creado (o impuesto) se incorpora realmente a la estructura previa, o simplemente se adosa como un anexo que en esencia sigue siendo un cuerpo extraño. Y si es un cuerpo extraño, ¿cuánto durará el injerto? Salvando las distancias, ningún caso mejor para graficar esto, que los fieles perros adiestrados que atacan sorpresivamente a sus amos.

La conducta nutricional es un hecho real en cuanto la miremos como una línea de comportamiento de una persona ante un objeto real. Y llamamos real a todo aquello que la persona considere como tal (sí es necesario cambiar esa realidad a favor de la salud, es otro tema).
Todo se enturbia cuando el conductismo intenta modificar esa línea de comportamiento, desde la premisa previa de que lo propuesto es lo sano. (Por supuesto que lo es, si uno está sano y conoce los límites, pero el paciente ya pasó esa frontera sin reconocerla)



La tercera opción debiera ser, y así lo sostenemos, o generar nuevos estímulos desde el interior del paciente, estímulos a los que le costara mucho más ser infiel, o aprender a reconocer que a los viejos estímulos les podemos ofrecer respuestas diferentes.
Este camino es más dificultoso, pero más efectivo, ya que no oculta un estimulo detrás de otro, sino que crea una nueva estructura de pensamiento y sentimiento modificando o reemplazando la estructura patológica precedente.
Podemos revertir la mala imagen de la conducta, construyendo un nuevo modelo de terapia integral y conductora, que aunque parezca un juego de palabras, implica una clara diferencia con las otras metodologías. Porque conducir no es lo mismo que generar una nueva conducta.
Cuando el profesional abandona su rol de poseedor del verdadero concepto de salud-enfermedad, cuando deja de pretender imponer una verdad única (su verdad) a través de estímulos de incierta duración y efectividad, cuando entiende que debe comprender a su paciente, entender qué quiere, cómo quiere lograrlo y hacia donde quiere dirigirse; entonces se convierte en un conductor que se limita a acompañar la creación de nuevos estímulos en vez de imponerlos.
O mejor dicho aún: el profesional acompaña en un nuevo conocimiento de los viejos estímulos para generar otras respuestas.
El paciente ya conoce el dolor. Demostremos que hay otra forma de hacer las cosas en la vida.

viernes, 16 de enero de 2015

Un cuerpo atlético y la excelencia deportiva...

¿Vale la pena conseguirlas aún poniendo en riesgo la salud? Uso de esteroides

Gran parte de la población mundial en la actualidad es sedentaria; su actividad física es tan pobre que su salud se ve afectada cada vez a más temprana edad. No obstante, se observa también el otro extremo, aquel grupo de personas que hasta pondrían en riesgo su salud por lucir un cuerpo que responda al estereotipo que la sociedad actual establece como “óptimo” y aún más, ser, a toda costa, altamente competitivo en la actividad física. En este artículo se ahonda en el tema de todas esas sustancias que las personas creen pueden ayudar a alcanzar el objetivo arriba mencionado, sin entender el perjuicio que acarrean para la salud. Otro aspecto preocupante, es que varias de estas sustancias se venden como “suplementos nutricionales”, no pudiéndose por lo tanto, garantizar la pureza y seguridad de las mismas.

¿Qué son los esteroides anabólicos?

Los esteroides androgénicos anabólicos (EAA’s) son sustancias sintéticas derivadas de la hormona natural testosterona. Pueden en un primer momento aumentar la masa muscular; pero ¡mucho cuidado! Estas sustancias producen una gran cantidad de efectos dañinos para la salud. Efectos adversos de los EAA’s(1) 1. Disminución del tamaño de los testículos con alteración en la producción de espermatozoides y por consiguiente infertilidad.
2.Problemas cardiacos: los EAA’s producen elevación de los lípidos, como el colesterol, lo cual puede conducir a infartos cardiacos y muerte súbita.
3. Daños en el hígado .
4. Alteraciones del comportamiento, que consiste en agresividad sexual, adicción y dependencia.
 5. Daños en los músculos y tendones que pueden conducir a su ruptura durante el ejercicio
 6. Ginecomastia irreversible, que es el crecimiento anormal de la glándula mamaria en el hombre.
 7. En la mujer los EAA’s causan irregularidades del ciclo menstrual y atrofia del seno. También causa “virilización”, que es masculinización de la voz, aparición de vello en lugares donde normalmente no existe.
8. En personas en crecimiento que toman EAA’s no alcanzan la estatura esperada. Los EAA’s son sustancias ilegales y altamente perjudiciales.

La androstenediona y la dehidroepiandosterona

Estos nombres corresponden a sustancias que son precursores de la testosterona. En realidad, no tienen ningún efecto benéfico sobre el ejercicio y sí tienen efectos adversos como son alteraciones en los lípidos de la sangre y virilización en las mujeres. Por lo tanto, no acepte productos que contengan estas sustancias. No va a obtener ningún beneficio y sí pone en riesgo su salud.

La creatina

Esta sustancia puede tener un leve efecto positivo a nivel muscular. Sin embargo, la acción de la creatina al interior del organismo en el músculo no es consistente, ya que su efectividad es máxima cuando se realiza ejercicio bajo condiciones muy específicas que casi siempre sólo se logran en los laboratorios deportivos. Además, la creatina no mejora la masa muscular, sino que mejora la relación masa muscular/fuerza desarrollada. Se considera que el mayor efecto de la creatina se alcanza cuando se practican ejercicios repetitivos como la bicicleta estática, el salto de cuerda o el canotaje. La creatina no es ilegal y no se evidencian efectos secundarios más que posiblemente un ligero aumento del peso entre 1.6 a 2.4 kgs cuando se usa en forma prolongada. Es posible que la relación costo/beneficio en la creatina en ocasiones no justifique su uso.

Alcaloides del Efedra

Son sustancias que se encuentran en ciertas plantas. Las formas procesadas de estas sustancias incluye la efedrina, la pseudoefedrina y la fenilpropanolamina; estos compuestos actúan a nivel del sistema nervioso central y son usadas generalmente como descongestionantes en el resfriado común.

Uso de esteroides

Muchas veces son incluidos en los “suplementos naturales”, a fin de incrementar el consumo de energía y en consecuencia la quema de grasa. Se estima que en el año 1999 se produjeron 3.000 millones de dosis de estos productos. No existen estudios concluyentes sobre la eficacia de estas sustancias y sí es más lo que se sabe acerca de sus efectos dañinos cuando son tomados en exceso, como son la producción de arritmias cardiacas, elevaciones en la tensión arterial, derrames cerebrales, entre otras. De hecho, la fenilpropanolamina fue retirada recientemente de los productos de venta libre utilizados para el resfriado común, ya que aumentaba el riesgo de derrame cerebral en las mujeres. Los alcaloides no son sustancias ilegales, pero están prohibidas por la mayoría de las organizaciones deportivas.

Conclusión

Tenga mucho cuidado con lo que consume. No se deje convencer por todas las sustancias que le prometen un mejor desempeño físico. El que le digan que es “producto natural”, no es garantía de que no pueda ser potencialmente dañino para su salud. En el mundo actual, la competencia deportiva y el lucir un cuerpo un cuerpo 100% armonioso son, muchas veces, una prioridad en gran medida desproporcionada, que ocupa la mente del individuo moderno. Los adolescentes, personas que están en el proceso de aceptación de su cuerpo, son individuos propensos a caer en ese afán por tener el cuerpo idealizado y puesto en un pedestal por la sociedad actual y si de la práctica deportiva se trata, ser altamente competitivo a toda costa, aún utilizando sustancias ilícitas que pueden poner en grave riesgo la salud. ¡Hay que estar atentos! Recuerde que el ejercicio practicado en forma sana, ayuda muchísimo para conservarse saludable.